El F.C. Barcelona conquistó su quinta Liga de Campeones luego de imponerse en un intenso partido a la Juventus de Turín en el Estadio Olímpico de Berlín. Rakitic abrió la cuenta en los primeros minutos, mientras que Morata igualó el duelo en la segunda parte. Cuando peor lo pasaba el Barça, Suárez y, en el último suspiro, Neymar, se encargaron de poner el 3-1 definitivo. Así, los de Luis Enrique logran el tan ansiado 'triplete' que obtuvieron por última vez con Pep Guardiola.
En la cima del fútbol europeo vuelve a situarse el Barcelona tras vencer a la Juventus de Turín en la final disputada en el Estadio Olímpico de Berlín. Ivan Rakitic estrenó el marcador en el minuto 4 y Álvaro Morata devolvió la igualdad tras el descanso. La jugada decisiva fue un penalti sobre Pogba no señalado y que precedió al gol que resultaría definitivo obra de Luis Suárez. Neymar redondeó la victoria ya en el 97'.
Lo que una jugada puede cambiar el partido. El Barcelona se ha proclamado campeón de la Liga de Campeones, la quinta en su historia, tras vencer por 1-3 a la Juventus de Turín. Ivan Rakitic logró un gol tempranero y Álvaro Morata consiguió el empate en los primeros compases de la segunda mitad. No obstante, la clave de la final en el Estadio Olímpico de Berlín estuvo en un penalti sobre Pogba que el árbitro no señaló y en la jugada justo posterior que terminó en el tanto de Luis Suárez que resultó ganador. La última jugada del partido deparó el último gol, obra de Neymar.
Luis Enrique planteó el partido con el cerebro y Massimiliano Allegri, con el músculo. La baja de Chiellini obligó al entrenador italiano a renunciar a una defensa con tres centrales, con la que hubiera pretendido atar a la 'MSN', aunque pronto vio que el equipo azulgrana es mucho más que Messi o el tridente. Fue con un gol culé tempranero, en el minuto 4, y de mérito coral. La 'Pulga', Jordi Alba y Neymar cocinaron una jugada a la que Iniesta se incorporó para servirle el centro en bandeja a Ivan Rakitic, que disparó para que el balón superara a Buffon.
Fue el inicio de un cuarto de hora de gran intensidad, tanto del Barcelona en ataque como de la Juventus para frenar las ocasiones, lo que tuvo su reflejo en Vidal, que vio una primera tarjeta amarilla tras una dura entrada sobre Busquets y se jugó otra después en otra falta sobre Messi.
Neymar lideró las ocasiones del conjunto culé, primero con un disparo que le fue rozando el larguero, justo después de que Vidal hubiera tenido la misma suerte, y después con un centro de Messi al que no llegó por poco. Eso sí, el primer paradón de Buffon fue para detener un disparo de Alves con el que ya se cantaba gol.
El Barcelona fue bajando su presión con el paso de los minutos y la Juventus tomó entonces la iniciativa con un Morata especialmente activo y que tuvo una buena ocasión en el minuto 24 con un zurdazo que se fue mordiendo el palo. Y Marchisio pudo haber logrado justo después el empate con otro remate que se fue por encima del larguero.
Se entró después en un período en el que el juego transcurrió en el centro del campo, sin grandes ocasiones y buscando los huecos por parte de los dos equipos hasta el descanso, aunque antes, en el minuto 40, Suárez pudo haber encarrilado más la final con un disparo que se fue por poco a la derecha de la portería y, sobre todo, con un disparo en la siguiente jugada en la que Buffon volvió a ejercer de salvador.
Morata sí celebró su gol contra el Barcelona
El protagonismo del portero de la Juventus fue permanente también tras el paso por los vestuarios, cuando logró frenar un contraataque de cinco jugadores azulgranas frente a tres del conjunto italiano. Sin embargo, otro reclamó los focos entre los de Allegri: Morata. El madrileño, que estaba siendo ya uno de los más destacados de su equipo, volvió a ver puerta gracias a un rechace de Ter Stegen tras un disparo de Tévez. Esta vez, y a diferencia de lo que hizo contra el Real Madrid, sí lo celebró.
Con el partido igualado, llegaron los mejores minutos de los italianos, que tendría su punto de inflexión en el minuto 67. Alves derriba a Pogba de forma clara, evidente, dentro del área pero el árbitro deja seguir el juego. Es inexplicable como el colegiado no llega a ver el penalti, pero deja la jugada para la polémica. Podría haber sido una más si no hubiera sido porque al dejar continuar propició que llegara el 1-2. En el contraataque, Messi llega ante Buffon y, aunque el portero repele el balón, Suárez está atento al rechace y marca.
No se acabaron ahí las jugadas de análisis, ya que en el minuto 72 el árbitro anuló un tanto a Neymar, que había rematado de cabeza un centro de Jordi Alba. Esta vez acertó, ya que el brasileño se había ayudado con el brazo para dirigir el balón.
La Juventus buscó volver a igualar el marcador y el Barcelona, sentenciar. El 1-3 definitivo llegó en la última jugada, ya en el minuto 97, después de un saque de falta a favor de la Juventus y al que acudió todo el equipo italiano en busca del milagro. El equipo azulgrana no se dejó sorprender e incluso montó el contraataque ante un Buffon que se había quedado solo y que no pudo hacer nada ante la triangulación que culminó Neymar.
El tanto del brasileño desató la locura del banquillo al tiempo que sonaba el pitido final. El Barcelona acababa de conquistar su quinta Liga de Campeones y se convertía en el primer equipo de la historia en lograr un segundo doblete de Liga, Copa y Champions. En la memoria quedará el triunfo y seguramente pocos se acordarán de las polémicas.
Fuente/actualidad.rt.com/antena3.com
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