Los pasados 18 y el 19 de julio se han celebrado en EE.UU. más de 300 protestas contra la política migratoria de Barack Obama y el flujo de inmigrantes que cruza ilegalmente la frontera desde México, muchos de ellos niños que no iban acompañados.
Los manifestantes se reunieron en las capitales de los estados en todo el país, en lo que ha sido llamado 'Día Nacional de Protesta contra la Reforma de Inmigración, Amnistía y Tensiones de Frontera'. "Nuestro objetivo es unir a los estadounidenses de todas las razas, partidos políticos y estilos de vida contra la invasión de inmigrantes ilegales inspirada por Obama", explicó William Gheen, presidente del comité de acción política Americanos por la Inmigración Legal (ALIPAC, por sus siglas en inglés).
Nos están invadiendo. Es por eso que estamos tomando una postura firme: estamos viendo que más de una de cada diez personas en todo el país está aquí ilegalmente
Gheen apuntó este miércoles que, según la encuesta del 20 de junio del instituto Gallup del estudio de la opinión pública, el 65 por ciento de los estadounidenses desaprueba la manera en que Obama maneja los asuntos de inmigración en el país.
"Cada vez más personas entienden que Obama es el contrabandista en jefe", dijo Gheen refiriéndose en gran parte a las enmiendas del 2012 que suaviza las directivas para la deportación de algunos jóvenes inmigrantes ilegales.
Gheen espera que el movimiento contrarreste la reciente ola de llegadas ilegales de inmigrantes a la frontera entre México y EE.UU. y al mismo tiempo envíe un mensaje a los políticos del país de que sus puestos de trabajo podrían estar en peligro si siguen apoyando lo que ellos consideran "una invasión".
Según otro activista, James Neighbors, mucha gente se siente atraída por el movimiento una vez informada del enorme costo que supone para EE.UU. el alojamiento de las personas llegadas ilegalmente al país. "Nos están invadiendo. Es por eso que estamos tomando una postura firme: estamos viendo que más de una de cada diez personas en todo el país está aquí ilegalmente", sigue él.
Los participantes hacen hincapié en que las protestas de este fin de semana son pacíficas. "No recurrimos a la violencia, con nuestras protestas simplemente ejercemos los derechos que nos proporciona la Primera Enmienda y educamos a los ciudadanos".
La Administración de Barack Obama ha solicitado 3.700 millones de dólares para atender a los inmigrantes que llegan irregularmente al país, en su mayoría niños no acompañados procedentes de América Central. Sin embargo, muchos estadounidenses quieren que se ponga fin a la llegada de este tipo de inmigración a sus localidades, informa WND.
Fuente/rt
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