Cristiano vuelve a ser el héroe madridista y da la Champions League 2015/16 al Real Madrid. Increíble partido el que se vivió en San Siro. Ambos equipos lo dieron todo, pero sólo uno se coronó como campeón.
En un icónico escenario como San Siro, el Real Madrid CF se coronó campeón de la UEFA Champions League por undécima tras una tensa e igualada final que se decidió en la tanda de penaltis. Sergio Ramos adelantó al equipo blanco, Yannick Carrasco igualó la contienda en el tramo final de partido y la tanda de penaltis decidió al nuevo campeón de Europa.
Tras disfrutar ambos equipos de dos semanas enteras para preparar el choque y siendo Raphaël Varane la única baja en ambas plantillas, los onces titulares de la final no tuvieron demasiado misterio. Stefan Savić fue finalmente el compañero de Diego Godín en el centro de la defensa del Atlético tras apostar Diego Simeone por el montenegrino en detrimento de José María Giménez. Zinédine Zidane sacó su once de gala e intentó buscar pronto y de forma directa la portería rival. Tras un par de llegadas sin sustancia de ambos equipos, Gareth Bale forzó la primera falta peligrosa en el minuto 5 y Casemiro remató a bocajarro el saque del galés forzando la primera gran parada de Jan Oblak en la noche.
Después de esta primera ocasión blanca el partido se estabilizó. El Atlético tragó saliva y ganó algunos metros para intentar evitar sustos, pero no lo logró. No había defendido bien la primera jugada a balón parado y la segunda lo hizo pero. Sacó Toni Kroos una falta, la peinó Bale y otra vez Sergio Ramos apareció en una final para poner al conjunto de Zidane por delante al cuarto de hora.
Un tanto que cambió el esquema del choque. El Atlético tenía que proponer más en desventaja y estiró sus líneas. El Madrid, nada incómodo con la situación, empezó a buscar en carrera a Benzema y a Bale aprovechando el buen tono de Kroos y Luka Modrić en el inicio del partido. Mientras, Antoine Griezmann peleaba con Ramos y Pepe para poder ser protagonista al mismo tiempo que Saúl Ñíguez intentaba sacar algo por el costado derecho con poco éxito.
En la recta final del primer acto era clara la sensación de que con menos esfuerzo el Madrid sacaba más. Gabi era prácticamente el único que se ofrecía para mover al Atlético cambiando con criterio el juego de banda y ordenando a sus compañeros, y en el minuto 43 por fin Griezmann encontró una rendija por la que probar suerte con un derechazo raso que se fue desviado.
Pero la segunda parte empezó con una buena noticia para los rojiblancos. Prácticamente en la primera jugada Pepe derribó a Fernando Torres en el área y el árbitro pitó penalti. Griezmann le pegó duro al centro y el larguero escupió su lanzamiento dejando un nudo en la garganta a toda la afición rojiblanca.
El golpe fue duro, pero el Atlético no lo acusó. Siguió presionando y colgando balones apoyándose mucho en Yannick Carrasco, que había entrado por Augusto Fernández en el descanso. También tuvo que cambiar Zidane a un lesionado Dani Carvajal, dando entrada a Danilo con más de media hora todavía por jugarse. Para entonces el partido era muy distinto a lo visto en la primera parte.
Más concentración rojiblanca, más ayudas, menos posesión del Madrid y más problemas para la zaga blanca y para Casemiro, que llegaba más tarde a los cortes. Pese a ello el Madrid aguantaba las embestidas e intentaba salir rápido buscando sobre todo a Bale en velocidad. Cristiano Ronaldo y Benzema aparecían poco y el equipo de Chamartín lo notaba mientras que Saúl si lo hacía en el área rival para probar suerte con una elegante volea en el minuto 60.
Fue a partir del minuto 65 cuando el Madrid comenzó de nuevo a soltarse. Alguna internada de Danilo por banda derecha, apariciones de Kroos y Marcelo por la izquierda, y el partido ya estaba de nuevo equilibrado. Simeone intentaba meter a su afición en el partido desde la banda, pero el tiempo corría en su contra. Benzema tuvo la opción de matar la final a falta de 20 minutos, pero otra vez Oblak apareció para dar esperanza al Atlético con una gran intervención.
Justo después Zidane dio entrada a Isco por Kroos para meter oxígeno e ideas al centro del campo blanco. Con el malagueño ya en el campo se fueron consumiendo los minutos, y Zidane le arañó alguno más al reloj con el cambio de Benzema por Lucas Vázquez. Pero el destino le tenía reservada una bala al Atlético y la aprovechó con un excelente centro de Juanfran y un remate de Carrasco en el área pequeña ante el que nada pudo hacer Keylor Navas en el minuto 79. El derbi en la final se iba otra vez a la prórroga.
En el tiempo extra el respeto mutuo dominó el juego. El miedo a los errores era atenazador, y solo el desparpajo de Carrasco parecía ser la excepción a la norma. Pero el cansancio acumulado era cada vez mayor y la final se fue a los penaltis entre calambres de los protagonistas y constantes imprecisiones.
En la dramática tanda Juanfran envió su lanzamiento, el cuarto del Atlético al poste. Cristiano Ronaldo se vio ante el penalti de su carrera y no lo falló desatando la locura y llevando al Madrid al Olimpo por undécima vez.
Ronaldo vuelve a ser el máximo goleador
El jugador del Real Madrid ha finalizado como máximo goleador de la UEFA Champions League por cuarta temporada seguida y por quinta vez en su carrera tras hacer 16 goles. Suma 55 en las últimas cuatro campañas.
Fuente/es.uefa.com
En un icónico escenario como San Siro, el Real Madrid CF se coronó campeón de la UEFA Champions League por undécima tras una tensa e igualada final que se decidió en la tanda de penaltis. Sergio Ramos adelantó al equipo blanco, Yannick Carrasco igualó la contienda en el tramo final de partido y la tanda de penaltis decidió al nuevo campeón de Europa.
Tras disfrutar ambos equipos de dos semanas enteras para preparar el choque y siendo Raphaël Varane la única baja en ambas plantillas, los onces titulares de la final no tuvieron demasiado misterio. Stefan Savić fue finalmente el compañero de Diego Godín en el centro de la defensa del Atlético tras apostar Diego Simeone por el montenegrino en detrimento de José María Giménez. Zinédine Zidane sacó su once de gala e intentó buscar pronto y de forma directa la portería rival. Tras un par de llegadas sin sustancia de ambos equipos, Gareth Bale forzó la primera falta peligrosa en el minuto 5 y Casemiro remató a bocajarro el saque del galés forzando la primera gran parada de Jan Oblak en la noche.
Después de esta primera ocasión blanca el partido se estabilizó. El Atlético tragó saliva y ganó algunos metros para intentar evitar sustos, pero no lo logró. No había defendido bien la primera jugada a balón parado y la segunda lo hizo pero. Sacó Toni Kroos una falta, la peinó Bale y otra vez Sergio Ramos apareció en una final para poner al conjunto de Zidane por delante al cuarto de hora.
Un tanto que cambió el esquema del choque. El Atlético tenía que proponer más en desventaja y estiró sus líneas. El Madrid, nada incómodo con la situación, empezó a buscar en carrera a Benzema y a Bale aprovechando el buen tono de Kroos y Luka Modrić en el inicio del partido. Mientras, Antoine Griezmann peleaba con Ramos y Pepe para poder ser protagonista al mismo tiempo que Saúl Ñíguez intentaba sacar algo por el costado derecho con poco éxito.
En la recta final del primer acto era clara la sensación de que con menos esfuerzo el Madrid sacaba más. Gabi era prácticamente el único que se ofrecía para mover al Atlético cambiando con criterio el juego de banda y ordenando a sus compañeros, y en el minuto 43 por fin Griezmann encontró una rendija por la que probar suerte con un derechazo raso que se fue desviado.
Pero la segunda parte empezó con una buena noticia para los rojiblancos. Prácticamente en la primera jugada Pepe derribó a Fernando Torres en el área y el árbitro pitó penalti. Griezmann le pegó duro al centro y el larguero escupió su lanzamiento dejando un nudo en la garganta a toda la afición rojiblanca.
El golpe fue duro, pero el Atlético no lo acusó. Siguió presionando y colgando balones apoyándose mucho en Yannick Carrasco, que había entrado por Augusto Fernández en el descanso. También tuvo que cambiar Zidane a un lesionado Dani Carvajal, dando entrada a Danilo con más de media hora todavía por jugarse. Para entonces el partido era muy distinto a lo visto en la primera parte.
Más concentración rojiblanca, más ayudas, menos posesión del Madrid y más problemas para la zaga blanca y para Casemiro, que llegaba más tarde a los cortes. Pese a ello el Madrid aguantaba las embestidas e intentaba salir rápido buscando sobre todo a Bale en velocidad. Cristiano Ronaldo y Benzema aparecían poco y el equipo de Chamartín lo notaba mientras que Saúl si lo hacía en el área rival para probar suerte con una elegante volea en el minuto 60.
Fue a partir del minuto 65 cuando el Madrid comenzó de nuevo a soltarse. Alguna internada de Danilo por banda derecha, apariciones de Kroos y Marcelo por la izquierda, y el partido ya estaba de nuevo equilibrado. Simeone intentaba meter a su afición en el partido desde la banda, pero el tiempo corría en su contra. Benzema tuvo la opción de matar la final a falta de 20 minutos, pero otra vez Oblak apareció para dar esperanza al Atlético con una gran intervención.
Justo después Zidane dio entrada a Isco por Kroos para meter oxígeno e ideas al centro del campo blanco. Con el malagueño ya en el campo se fueron consumiendo los minutos, y Zidane le arañó alguno más al reloj con el cambio de Benzema por Lucas Vázquez. Pero el destino le tenía reservada una bala al Atlético y la aprovechó con un excelente centro de Juanfran y un remate de Carrasco en el área pequeña ante el que nada pudo hacer Keylor Navas en el minuto 79. El derbi en la final se iba otra vez a la prórroga.
En el tiempo extra el respeto mutuo dominó el juego. El miedo a los errores era atenazador, y solo el desparpajo de Carrasco parecía ser la excepción a la norma. Pero el cansancio acumulado era cada vez mayor y la final se fue a los penaltis entre calambres de los protagonistas y constantes imprecisiones.
En la dramática tanda Juanfran envió su lanzamiento, el cuarto del Atlético al poste. Cristiano Ronaldo se vio ante el penalti de su carrera y no lo falló desatando la locura y llevando al Madrid al Olimpo por undécima vez.
Ronaldo vuelve a ser el máximo goleador
El jugador del Real Madrid ha finalizado como máximo goleador de la UEFA Champions League por cuarta temporada seguida y por quinta vez en su carrera tras hacer 16 goles. Suma 55 en las últimas cuatro campañas.
Fuente/es.uefa.com