1. Conducir
Todos saben que manejar un auto después de beber es un acto peligroso, pero pocos realmente se dan cuenta que conducir somnoliento también lo es.
Un estudio publicado por Journal Archives of Internal Medicine, determinó que los conductores ebrios y somnolientos tienen las mismas probabilidades de tener un accidente. “Sabemos por estudios experimentales que 4 horas de pérdida de sueño son tan dañinas como un paquete de seis cervezas”, señaló Christopher Drake, científico experto en trastornos del sueño.
Esto también corre para pilotos, operadores ferroviarios y camioneros, pues todos ellos reportan errores en su trabajo debido a la somnolencia, según la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos.
2. Tomar decisiones importantes
Una investigación de Duke University Medical Center observó mayor actividad cerebral en las áreas que evalúan los resultados positivos después de dormir poco. También notaron una disminución de la actividad en áreas del cerebro que evalúan los resultados negativos.
Esto quiere decir que la falta de sueño sesga nuestro poder de tomar decisiones, inclinándonos hacia el optimismo, lo que nos puede llevar a elegir sin sopesar los pros y contras. Esto puede hacerte cometer un error especialmente si vas a comprar un auto, arrendar un departamento, o tomar una opción laboral.
3. Hacer las compras del supermercado
Un estudio publicado en Journal Obesity, señala que quienes van al supermercado después de haber dormido muy poco, pueden comprar más alimentos altos en calorías.
Esto ocurriría porque la falta de sueño tiene un impacto en el apetito y el nivel de autocontrol, llevando a realizar compras impulsivas, señala el autor de la investigación, Colin Chapman, de la Universidad de Uppsala.
Este estudio mostró que los hombres compraban un 9% más de calorías y un 18% más gramos de alimentos en general después de dormir poco.
4. Comprar online
Como la falta de sueño sesga las decisiones y amplifica la impulsividad, evidentemente deberías evitar comprar por internet si has dormido poco. Tu razonamiento lógico y juicio están alterados por lo que no es una buena idea dejarte llevar por las ofertas que ves en tu computador.
5. Confrontar a alguien
Si necesitas confrontar a alguien, no lo hagas la mañana siguiente de haber dormido mal. Es probable que la falta de sueño te haga estar más emocional que de costumbre, y salgas perjudicado.
La privación de sueño altera tu razonamiento y te hace dar respuestas equivocadas, señala Matthew Walker, experto en trastornos del sueño de Harvard y autor principal de un estudio al respecto. En su investigación, determinó que los cerebros con falta de sueño eran 60% más reactivos a imágenes negativas o perturbadoras.
Fuente/yvkemundial
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